El arte de comunicar el arte: reflexiones desde el taller “Herramientas del marketing para productos culturales”

El pasado 06 de Noviembre, en la Escuela de Arte Dramático “Virgilio Rodríguez Nache”, se llevó a cabo el taller “Herramientas del marketing para productos culturales”, a cargo de la docente Grazia Rojas, especialista en Marketing, Publicidad Teatral y Cultural. La sesión, dirigida a gestores culturales y artistas, invitó a reflexionar sobre la relación entre el arte, la comunicación y las estrategias necesarias para lograr que los proyectos culturales encuentren su verdadero público.
Durante el encuentro, se abordó cómo el teatro, más allá de su valor artístico, sigue siendo un espacio de encuentro y reflexión personal, donde el espectador se descubre a sí mismo a través de las historias que presencia. Sin embargo, también se reconocieron los desafíos que enfrenta el sector cultural en el Perú: la falta de inversión, la necesidad de revalorar el trabajo artístico y la urgencia de modernizar la forma en que se venden y promueven las obras teatrales. El arte necesita ser sostenible, y para ello, requiere no solo pasión, sino también una gestión estratégica que lo haga visible y accesible.
En ese contexto, Grazia Rojas resaltó que el marketing cultural no debe entenderse como un conjunto de técnicas comerciales, sino como un ecosistema integral de comunicación que permite transmitir el valor simbólico y emocional de una propuesta artística. Incluso los eventos gratuitos, señaló, necesitan de estrategias claras para conectar con su público, porque comunicar bien no se trata solo de vender, sino de crear vínculos y generar experiencias significativas. Observar cómo el público reacciona, entender sus emociones y adaptar las estrategias en función de esa respuesta es una de las claves para mantener viva la relación entre el arte y la sociedad.
Uno de los temas que despertó mayor interés fue el de la comunicación y promoción dentro de la industria cultural, considerado un punto crucial para el crecimiento del sector. Rojas enfatizó que hoy en día se necesitan perfiles profesionales especializados en comunicación cultural, capaces de traducir el lenguaje del arte a formatos atractivos, comprensibles y coherentes con las nuevas dinámicas del consumo cultural. Si bien el boca a boca sigue siendo una herramienta poderosa, ya no basta en un entorno donde las distracciones son constantes y la competencia por la atención del público es cada vez mayor. Por eso, una buena campaña de comunicación, incluso con recursos moderados, puede marcar la diferencia entre un proyecto que pasa desapercibido y uno que logra un verdadero impacto.
La docente también invitó a reflexionar sobre la realidad de la producción de eventos y conciertos en el país, un campo que enfrenta desafíos logísticos, económicos y sociales. La desconfianza del público hacia las producciones locales sigue siendo una barrera que limita la asistencia y el crecimiento del sector. Frente a ello, la formación de público se vuelve una tarea prioritaria: educar, comunicar con claridad y apostar por la transparencia son pasos fundamentales para fortalecer la relación entre los creadores y la comunidad.
El taller dejó una enseñanza clara: el arte necesita ser comunicado con estrategia, sensibilidad y propósito. No basta con crear, hay que saber contar lo que se crea. En tiempos donde la atención se dispersa fácilmente, el desafío del gestor cultural está en encontrar nuevas formas de conectar con las personas, transmitir el valor de su propuesta y hacer que cada experiencia artística deje una huella. El marketing, bien entendido, no es un enemigo del arte, sino una herramienta para que este llegue más lejos y siga transformando vidas.
